Birke Baehr quiere que sepamos
cómo se hace la comida, de dónde viene y lo que hay en ella. A los 11
años está planeando una carrera como productor orgánico.
A los 9 años, mientras viajaba con su familia, comenzó a estudiar las
prácticas agrícolas sostenibles y orgánicas tales como el compostaje,
lombricultura, envasado y conservación de alimentos.
Pronto descubrió su otra pasión: la educación de los demás
-especialmente de sus compañeros- acerca de la destructividad del
sistema alimentario industrializado y las alternativas. Baehr es
voluntario en la Sociedad Protectora de Animales y ama trabajar para
ellos. Su sitio es www.birkeonthefarm.com
Fecha del video (Agosto 2010)
Tomado de: Periodismo Alternativo
Visto en : La Verdad Oculta
Un estudio comparativo encontró diferencias sustanciales entre la noción de realidad entre niños laicos y religiosos
De acuerdo con una investigación publicada en la revista "Cognitive Science", a los niños pequeños expuestos a la religión se les dificulta distinguir entre realidad y ficción.
Para llegar a esta conclusión, los expertos tomaron grupos de niños de 6 años de edad que asistían a escuelas públicas (no religiosas) y parroquiales.
Se les contó historias religiosas, fantásticas y realistas; y se les
pidió que mencionen si los hechos y personajes eran irreales.
Los niños que iban a escuelas parroquiales o que iban regularmente a la iglesia tuvieron una dificultad significativa versus los niños que tenían una educación laica, al momento de seleccionar por ejemplo, animales que hablan como elementos ficticios.
Los niños expuestos a la religión se mostraron también más confiados en que eventos imposibles de alcanzar, pueden lograrse por una intervención divina; por lo que recurrieron a esa explicación para justificar sus falsas categorizaciones.
Los autores de este trabajo titulado "Los juicios sobre realidad y ficción de los niños de entornos religiosos y no religiosos", sugieren
que "la enseñanza religiosa, especialmente la exposición a las
historias de milagros, lleva a los niños a una receptividad más genérica
hacia lo imposible. Es decir, una más amplia aceptación que lo imposible puede suceder".
Tomado de:
El Comercio (Perú)